Aunque este año seguramente serán un poco diferentes a lo habitual, para muchos ya han llegado las esperadas vacaciones. Estas semanas son para disfrutar y recargar pilas, pero a veces esta relajación hace que dejemos un poco de lado nuestros hábitos saludables y no prestemos tanta atención a las pequeñas acciones sostenibles.

Hoy queremos compartir algunos consejos para poder disfrutar de este tiempo de descanso y diversión de una forma sostenible para lograr que nuestro impacto en el entorno sea positivo.

Acciones sostenibles durante las vacaciones

Transporte

Si queremos llevar una vida sostenible, el transporte elegido para realizar nuestros desplazamientos diarios es primordial; no debemos olvidar este aspecto tampoco durante las vacaciones. Tanto para el trayecto hacia nuestro destino final como para los pequeños desplazamientos realizados en el mismo, es importante barajar todas las posibilidades de las que disponemos. 

Cuando sea posible, el sistema de transporte público es la mejor opción. Si por la ubicación del destino debemos utilizar un vehículo privado, es esencial conducir de manera eficiente y aprovechar el número de ocupantes.

En pequeños desplazamientos podemos optar por caminar o ir en bici; además de ser más sostenible, es una manera de conocer mejor el entorno y mantener un estilo de vida saludable.

Si utilizamos nuestro vehículo privado para visitar zonas naturales como playas o parques, debemos respetar siempre las indicaciones establecidas y estacionar en las zonas indicadas a tal efecto.

Entorno

Podemos disfrutar de nuestras vacaciones en entornos muy dispares: en parques naturales, en la playa, practicando turismo urbano… En cualquier caso, es fundamental mantener el máximo respeto hacia nuestro entorno.

Los parques naturales establecen unas normas de conducta destinadas a respetar la flora y la fauna local, normalmente especies autóctonas que debemos proteger. Es importante no realizar ninguna actividad que ponga en peligro el entorno. 

Debemos dejar los espacios visitados tal y como los encontramos, llevándonos los residuos que hayamos generado, pero sin coger elementos naturales como conchas o nidos porque tienen una utilidad en la naturaleza.

Por otro lado, el verano es una de las épocas más peligrosas en cuanto a riesgo de incendios forestales. Es necesario prestar atención a la actividad que vayamos a realizar para no aumentar el riesgo de los mismos, ya sea con barbacoas u olvidando elementos que puedan fomentar la creación de incendios, como colillas o material inflamable.

Materiales

En vacaciones también es importante tener en cuenta las tres “R”: reducir nuestro consumo comprando de forma responsable y solo lo necesario, reutilizar los materiales para darles nuevos usos y reciclar los objetos correctamente. Con una buena previsión, llevándonos nuestra propia botella y cubiertos, podremos reducir el plástico de un solo uso evitando productos desechables. Las bolsas de tela no pesan ni ocupan lugar y nos ahorrarán utilizar bolsas de plástico. Acuérdate de poner algunas en tu maleta.

Muchos de los productos cosméticos que utilizamos para tomar el sol están hechos con ingredientes que dañan el entorno marino. El uso de un protector solar respetuoso con el mar y los arrecifes nos ayudará a preservar el medio ambiente. Cada vez encontramos más opciones sostenibles en el mercado.

Ahorro consumo energético

En verano se dispara el consumo de energía debido a un uso excesivo del aire acondicionado. Vestir con tejidos frescos, ventilar la estancia, bajar las persianas evitando el impacto directo del sol, utilizar ventiladores e hidratarse continuamente pueden ayudarnos a mitigar el calor. Si es tan elevado que requiere el uso del aire acondicionado, se aconseja que la temperatura no sea inferior a 24º.

La mayoría de los hoteles cambia diariamente las toallas, pero muchos nos dan la oportunidad de decidir utilizar la misma para ahorrar agua. Si en nuestros hogares no la cambiamos tan asiduamente, deberíamos optar por hacer lo mismo fuera de casa. Pon atención a la señal que pide cada hotel para poder reutilizarlas.

Alimentación

Según datos del Ministerio de Agricultura y Pesca, en verano el desperdicio alimentario aumenta un 11%. La principal causa son las altas temperaturas que acortan el tiempo de estado óptimo de productos frescos como las frutas y verduras, pescados, huevos o leche.

Planificando los menús ahorraremos comprar de más y evitaremos desperdiciar la comida.

Recuerda que consumir productos locales e integrarse en sus costumbres es una excelente manera de conocer otros entornos.

Os deseamos a todos unas felices vacaciones.